Llámalo (O, no)

(Sandra Lázaro)

Llámalo feminismo

Llámalo femenino (y masculino)

Llámalo igualdad. (De verdad)

Llámalo empoderarte (o, simplemente, quererte.)

Llámalo amar tu cuerpo (y tu mente)

Llámalo ovarios (y tetas)

Estrías. Arrugas.

Llámalo romper con los estereotipos (absurdos)

Llámalo madre (la nuestra)

Llámalo parar el maltrato (y, el trato malo)

Llámalo acabar con el techo de cristal (y de cemento)

Llámalo lágrimas de hombre (y de niño)

Llámalo fortaleza (y sueños)

Llámalo Simone (con habitación y vida propia)

Llámalo poesía (en un mundo escrito en prosa)

Llámalo locura (en la enferma sociedad)

Llámalo devolver las alas que el machismo arrancó (Sin permiso)

Llámalo a gritos (y a oscuras)

Bajito. O entre libros.

Llámalo como puedas (y quieras)

O no lo llames.

Pero. Realízalo.

 

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